sábado, 6 de diciembre de 2014

EN LA CUERDA FLOJA

EN LA CUERDA FLOJA

La nutrida marcha, que a decir de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos (CMMC) rebasó los cinco mil participantes de diversas agrupaciones, asociaciones civiles, médicos, enfermeras, trabajadores sindicalizados del sector salud, del volante, del Movimiento en Defensa de la Paz de Tepoztlán y de otros rincones del Estado de Morelos, coreaban al unísono en altos decibeles “Fuera Graco, regrésate a Tabasco” y otras consignas más. El hartazgo ha llegado al límite, producto de un gobierno insensible que se niega a escuchar a la ciudadanía y por la inseguridad que no cede. Los delitos de todo tipo continúan asolando a los morelenses y han llevado a un grave retroceso en la economía local, que sigue con tasas de crecimiento negativas desde que inició el gobierno de Graco Ramírez Garrido Abreu hace poco más de dos años, colocando al Estado de Morelos en los últimos lugares de acuerdo a cifras del INEGI. La inversión y creación de empleos es inexistente (el gobierno dice que se crearon nuevos empleos, pero es consecuencia de los que migraron de las outsorcings) y cada vez se da cuenta de familias que por generaciones han vivido en el estado y que han tenido que emigrar a otros estados de la República o al extranjero, donde tendrán la seguridad anhelada y mejores oportunidades de desarrollo para sus familias. Solo los muy valientes se resisten a abandonar sus negocios y hogares a pesar de haber sido víctimas de alguno de los tantos delitos, o bien porque no hay quien quiera comprar a menos que sea de auténtico remate. Media capital está en venta o renta.








A decir de los organizadores esta es la décima segunda marcha, incluidas las que ha organizado el clero, por difícil que esto se pueda entender. La iglesia se ha sumado a este clamor y ha organizado dos de ellas, una en la capital y otra en Cuautla, encabezadas por el Obispo de la Diócesis de Cuernavaca, S.E.R. Mons. Ramón Castro Castro, quien ha manifestado que algunos sacerdotes han sido blanco de amenazas y extorsión por el cobro del llamado “derecho de piso”.


Así también, indicó que en sus visitas parroquiales ha encontrado que la principal necesidad de la gente es la seguridad. Como respuesta a estas acciones, recibió descalificaciones y críticas tanto del Ejecutivo Estatal como del Secretario de Gobierno, Jorge Messeguer Guillén. Esta actitud confrontativa ha sido la divisa del autollamado “Gobierno de la Nueva Visión”, que en lugar de escuchar y conciliar con los diversos sectores de la población e instituciones, impone su verdad con el consabido “si no piensas como yo estás contra mí”. En Morelos no cabe opinar o pensar diferente.

 

En el clímax de su megalomanía por el poder, porque piensa que puede ser presidenciable, en días recientes convocó al Presidente de la República, a los partidos políticos, empresarios, instituciones religiosas de todo tipo y a la sociedad en general, a un DIÁLOGO NACIONAL para frenar la crisis, cuando él no ha sido capaz de sintetizar y consolidar el resultado de sus Diálogos por Morelos que realizó meses atrás e implementar los programas y acciones así como las políticas públicas que requieran ser corregidas o creación de nuevas. Se autoerige en todo un estadista a nivel nacional cuando no ha sido capaz de sacar adelante al estado que gobierna, contribuyendo a su desestabilización al retener buena parte de las participaciones federales a varios municipios que por ley les corresponden, ocasionando que éstos no cumplan con los servicios más elementales que requieren los ciudadanos (ver Corredor Norte Sur Zapata de la primera quincena de Agosto 2014). Para rematar con la cereza del pastel, el gobernador ha manifestado en diversos foros que Morelos no necesita un fiscal como Michoacán, pero la realidad lo rebasa, por lo que el Gobierno de Enrique Peña Nieto, por conducto de su Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, ha decidido tomar el control de la seguridad en cuatro municipios del estado: Amacuzac, Puente de Ixtla, Coatlán del Río y Tetecala, a pesar de su recién inaugurado y cacareado C5 y su mando único, que ha puesto como ejemplo a todos sus colegas gobernadores. A pocos días de implementado el operativo, el resultado, desde la óptica de la población es positivo, que respira tranquila por la presencia de los elementos de la Policía Federal y del Ejército, y no es “mera percepción” como descalifica siempre el gobernador y sus subordinados a cargo de la seguridad. Jojutla, cuya alcaldesa ha sido afín a la corriente graquista, ha solicitado en varias ocasiones la presencia federal en su municipio para hacer frente a la inseguridad. Los habitantes de la Capital Cuernavaca y los municipios conurbados de Jiutepec y Temixco, han solicitado al Secretario de Gobernación su presencia también, debido a que los delitos de alto impacto se siguen presentando.




Por todo ello, Graco Ramírez Garrido Abreu, que ya abrió el fuego en diferentes frentes, incluso con líderes de su partido, se perfila a emular a su ex vecino de Guerrero y ya se  balancea en la cuerda floja.   

CARLOS RUIZ VENEGAS

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