URGE REFORMA ELECTORAL Y POLÍTICA

RECETARIO 32

Carlos Ruiz Venegas

URGE REFORMA ELECTORAL Y POLÍTICA

 (Primera de dos partes)

Hace pocos días comentaba con algunos compañeros con quienes comparto opiniones, sobre los acontecimientos que giran alrededor de los procesos electorales y del ánimo de la población respecto de los mismos. Así también, en conversaciones con gente dedicada a varios oficios, el pueblo en si, recogemos la misma sensación: Hastío. Todos los años nos bombardean con publicidad electoral, debido a que las campañas, aunque sean regionales, se difunden a nivel nacional.

Los medios electrónicos magnifican estos eventos en programas cómicos, en parodias, en entrevistas en los principales noticieros y en comerciales que de tanto repetirse cambias de canal. Con todo esto, los medios saturan a los que se encuentran en el desempleo, el cual no respeta edad, preparación académica, capacitación y sexo (que no género de acuerdo con la RAE); a los 60 millones que se encuentran en pobreza y pobreza extrema, de acuerdo con el científico método utilizado por el comité para medirla por el Coneval (pobreza multidimensional y vulnerabilidad); a las amas de casa que no les alcanza para el gasto diario en el hogar; a los jóvenes que no pudieron ingresar a la universidad o bachillerato, por no haber cupo suficiente o porque sus familias no cuentan con recursos para costear una escuela privada, aunque sea “patito”; a los enfermos que tienen que conformarse con un sistema de salud deficiente y sin medicinas, con todo y seguro popular (pregúntenle a la pareja que tuvo quintillizos); a quienes tienen que vivir en casas de lámina o cartón en predios invadidos; a los que padecen las consecuencias de los desastres naturales e inundaciones recurrentes por incapacidad de las autoridades de los tres niveles de gobierno para atenuar los daños; a los que pierden su escaso patrimonio cada año por estas causas; a los que habitan en los cinturones de miseria que existen en todas las poblaciones de este mágico País; a los que son víctimas de la delincuencia y que pierden lo poco que tienen para irla pasando; a los que padecen el sistema judicial y son presa de la injusticia e impunidad; a los pensionados y jubilados que reciben una mísera pensión (y que está en peligro de desaparecer); a los de la tercera edad que no cuentan ni con este “beneficio”; a los medianos y pequeños empresarios que tienen que bajar la cortina debido al modelo económico liberal y globalizador; a los que les prometieron vochos y changarros e invitaron a emprender un pequeño negocio sin apoyos del sistema bancario, cuando varios de éstos desaparecieron o tienden a ello merced al creciente número de megatiendas y a la inseguridad; en fin, a una inmensa mayoría que se queda estupefacta, adolorida, resentida y encabronada, porque se pregunta: ¿Cuántos males se podrían solucionar con el inmenso, estúpido, ofensivo y colosal derroche que se gasta en pre-precampañas, pre-campañas y campañas durante todos los años y a todos los niveles de gobierno?

Ante el gran número de partidos (los tres magníficos y los emergentes aliancistas) nuestra democracia se ahoga. Los cuatro “emergentes”, si pudieran aliarse, juntos no podrían superar a cualquiera de la trilogía, basándonos en los resultados obtenidos en contiendas electorales pasadas por el verde ecologista, del trabajo, convergencia y nueva alianza. Este último no nació por un clamor ciudadano; proviene del magisterio dividido y liderado por Elba Esther Gordillo, alfil de calderón como ahora lo es de Peña Nieto. No es difícil predecir que solos no lograrán captar la preferencia del electorado aunado a las siguientes razones: 1. Los antecedentes de sus líderes. 2. No cuentan con la antigüedad ni méritos suficientes a un año de distancia de las elecciones, cuando los demás ya andan desbocados. 3. Tienen una partida económica asignada en franca desventaja comparada incluso con los otros “dos menores” (pvem y pt ), y por ahora, ojalá sea temporal, las elecciones se ganan con dinero o con “cañonazos” (de dinero, obvio).

Por ello y como ya se ha dicho, estamos condenados a que nos gobierne la mayoría de la minoría, como ha sucedido en todas las elecciones estatales recientes, incluso en la federal del 2006, ya que solo vendrán a fragmentar aún más la ya de por si escasa participación ciudadana y a un costo mayor para los mexicanos, lo que nos da el primer lugar en contar con los votos más caros del mundo. Por eso urge una reforma electoral integral, cuyas ideas, acumuladas desde que tuve el honor de presidir la Comisión Local Electoral del Estado de Morelos en 1987-1988, plasmaré en mi próxima entrega, aunque las listaré como un índice para irlas desahogando una a una:

1. Solo debe haber una elección cada cuatro años con posibilidad de reelección.

2. Que los consejos electorales (estatales y federal), sean realmente ciudadanos.

3. Que el voto sea obligatorio.

4. Que el ganador obtenga cuando menos el 51% de los votos; de lo contrario que se vote a una segunda vuelta.

5. Que no haya alianzas ni coaliciones, sino hasta la segunda vuelta, siempre y cuando los partidos alcancen como mínimo el 10% de los votos.

6. Que en caso de que la diferencia sea del 2% entre ganador y perdedor, se realice recuento de voto por voto.

7. Que se establezcan las figuras de plebiscito, referéndum y revocación de mandato.

8. Que se eliminen los diputados plurinominales.

9. Que se designe un solo senador por estado.

10. Debe establecerse un gasto electoral razonable.

11. Que el gasto publicitario sea ejercido por lo institutos electorales con equidad.

12. Que se prohíban las pre-campañas.

13. Que no se permita financiamiento extra u oscuro.

14. Que no se permitan las encuestas.

15. Que nadie se promueva desde un cargo público.

16. Que los resultados solo los den los institutos electorales.

17. Que los ministros de la Suprema Corte y Tribunales Federales sean designados por los ciudadanos.

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CARLOS RUIZ VENEGAS

TT:@DONVITO11           doncarlosruiz@hotmail.com

Versión original          : 25 de Julio de 2005

Actualizado                : 25 de Abril de 2011